Escocia es un destino recurrido por los turistas, pero pocos descubren realmente la auténtica esencia que esconde esta nación británica. Con más de 800 islas por visitar,es el destino perfecto para parejas que en su luna de miel buscan tranquilidad a la vez que aventuras continuas.

Tierra de castillos y misterios  

Lo más habitual es visitar Edimburgo, su capital, o Glasgow, la ciudad más grande. Pero Escocia ofrece mucho más, y es perfecto para aquellos que les fascina la idea de alquilar un coche y descubrir nuevos lugaresa través de sus infinitas carreteras, desde las que puedes ver animales de todo tipo. Trazaros un mapa de ruta, porque con más de 2.000 castillos por visitar, tendréis que elegir entre los que consideréis más misteriosos y atrayentes.

Os recomendamos alojaros en los numerosos Bed&Breakfast,que encontraréis a lo largo de todo vuestro recorrido en coche. Lejos del dinamismo de las ciudades y el ritmo de los hoteles, podréis conocer la hospitalidad de su gente, y sobre todo, probar platos tan famosos como el haggis, hecho a partir de pulmón, corazón, hígado y estómago.

Debemos tener en cuenta que en Escocia llueve uno de cada tres días, así que poned un impermeable en la maleta, porque eso no puede impedir descubrir todos los lugares fruto de leyendas sobre fantasmas, brujas y misterios. No os vayáis sin probar el “agua de vida” escocesa, como ellos llaman a una buena copa de whisky.

 

¡Preparaos para vuestro próximo destino!